Arquidiócesis de México: “Con el dolor de una mamá no se juega”
Mons. Francisco Javier Acero Pérez, obispo auxiliar de la arquidiócesis de Ciudad de México aseguró que las madres buscadoras tienen mucho que aportar y por ello no se debe ideologizar ni politizar su dolor. Foto: Desde la Fe
Luego de reiterar el apoyo incondicional de la Arquidiócesis Primada de México a las madres buscadoras en su lucha, monseñor Francisco Javier Acero Pérez hizo un llamado para no politiza con el dolor de las mamás que han perdido a sus hijos.
“Esto es una acción pastoral y es importante decir que con el dolor de una mamá no se juega, el dolor de una mamá no se ideologiza, no se politiza”, aseguro el Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de México durante una conferencia ofrecida por las madres buscadoras María Herrera, Verónica Rosas y Jacqueline Palmero en la Basílica de Guadalupe.
Luego de informar que la Arquidiócesis de México está formando una Comisión de la Mujer dentro de la Vicaría de Laicos donde habrá una sección de Madres Buscadoras, monseñor Acero Pérez destacó que las mujeres con dolor tienen muchas soluciones para el país y ojalá se les escuche sin intentar ideologizarlas.
“Las mujeres con dolor, las mujeres cuando viven una situación de dolor, al final el mismo dolor les va dando fuerzas para ofrecer soluciones y estas mujeres buscadoras tienen muchas soluciones para nuestro país, ojalá se las escuche, no para ideologizarlas sino para promover este tejido social, este volver a tejer todo esto”, aseveró.
Madres buscadoras agradecen la apertura y el apoyo de la Iglesia
María Herrera, Verónica Rosas y Jacqueline Palmero reconocieron el apoyo que desde hace más de un año les ha otorgado la Arquidiócesis de México y la apertura que han tenido no solo para escucharlas, sino también para reconfortarlas para soportar el fuerte dolor que representa el hecho de que sus hijos se encuentren desaparecidos.
“Nos sentimos parte de nuestra Iglesia. El ser atendidas, ser escuchadas y estar en este lugar para nosotros es un gran logro, en medio del dolor y del sufrimiento que hemos venido arrastrando. El sentir el amor, la atención de nuestros pastores es uno de nuestros mejores logros, porque con el gobierno puedo decir que no se logró avanzar en lo más mínimo”, indicó Herrera.
Por su parte Verónica Rosas indicó que “su corazón” siente mucha gratitud por esta apertura que ha tenido la Iglesia católica desde el año pasado, cuando les abrieron las puertas de la Basílica de Guadalupe. “Aquí se siente este abrazo, este cobijo de la Iglesia católica que el día de hoy, en especial, nos abraza, porque hoy para muchas madres no hay nada que celebrar porque está esa ausencia, ese vacío en nuestras casas, en nuestro corazón”, subrayó.
En su turno, Jacqueline Palmero agradeció que la Iglesia les ha arropado, lo que es muy reconfortante para su alma, porque acrecienta la fe en los creyentes. “Es muy importante que hoy, 10 de mayo, que para nosotras no es un día que se festeja, sino un día de lucha, que la comunidad católica, y más en este recinto tan preciado para todos los mexicanos, seamos recibidas. Es muy gratificante que nos volteen a ver y que contamos con su apoyo. Algo que impulsa a las madres a seguir buscando es la fe”, recalcó.
Avanza la unificación de más de 270 colectivos de todo el país
Las madres buscadoras informaron que más de 270 colectivos nacionales realizan un proceso de unificación a fin de crear una sola instancia nacional para la búsqueda de desaparecidas y desaparecidos en México, para alcanzar acuerdos que les permita fortalecer su lucha y trabajo para localizar a sus seres queridos.
“Hemos venido haciendo una especie de uificación nacional, que es unificar el dolor de todas las madres y las familias, que tienen un familiar desaparecido, porque nos sentimos humilladas, relegadas de la sociedad y a veces de los mismos familiares”, informó María Herrera.
Durante la conferencia de prensa ofrecida en el Auditorio de la Basílica de Guadalupe, Herrera aseguró que la situación más cruel que pueda pasar un ser humano es que le arrebaten un hijo, “es lo peor, porque sabemos que solo Dios tiene esa facultad para dárnoslos y quitárnoslos en el momento que Él lo decida”.
Reitera la Iglesia CDMX apoyo incondicional a las madres buscadoras
Durante la Santa Misa ofrecida en la Basílica de Guadalupe en honor de las madres buscadoras, monseñor Francisco Javier Acero Pérez, señaló que lo más doloroso que puede vivir una madre es la pérdida de su propio hijo, por lo que les indicó que ellas pueden seguir contando con el apoyo de la Iglesia para escucharlas, acompañarlas con respeto y cariño.
En su homilía, el Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de México señaló que “como sacerdote quiero agradecer el testimonio de amor de las madres buscadoras de nuestro país, porque con su búsqueda en fosas clandestinas nos hacen ver que las dificultades se superan con el amor”.
Al presidir la celebración eucarística, recalcó que el amor de las madres buscadoras a sus hijos es lo que nos hace fuertes, “en lo personal en mi vocación como sacerdote”, porque así como él muchos las están acompañando conociendo su testimonio de lucha, su tesón, sus lágrimas y sobre todo sus ganas de encontrar justicia.
En este sentido, monseñor Acero Pérez hizo un llamado a las autoridades de los tres niveles de Gobierno a velar por los derechos de la mujer y para que cese todo tipo de violencia hacia ellas. “Celebramos a las mamás, y en especial recordamos a las mamás que tienen sus familiares desaparecidos en un momento difícil para nuestro país”.